Berlín, años 30. El partido nazi domina una ciudad donde el amor, el baile y la música se mezclan en la vida nocturna del Kit Kat Club. Un refugio mágico donde la joven Sally Bowles y un divertido maestro de ceremonias hacen olvidar las tristezas de la vida.
Por Hernán Agustini / Mabel Fernández
La adaptación de Cabaret, dirigida por Cristian Wilhjelm, parece presentarse en momentos donde el mundo cada vez se vale más de la violencia como herramienta creadora de realidad y el país se suspende en una calma sofocante llena de murmullos prejuiciosos y sedientos de venganza. No están los nazis ni la crisis del ’30, pero tampoco son los ‘60 del Mayo Francés y la “imaginación no llegó al poder”.



Cabaret, el musical que se estrenó en el ’66 y llegó al cine en el ‘72 sigue sacudiendo con sus planteos tan actuales como incómodos, porque el dinero sigue haciendo mover al mundo, el amor sigue batiéndose a duelo entre el corazón y la conveniencia, la mirada unívoca se vuelve a escuchar como los dueños del mañana y el arte como bálsamo de una realidad asfixiante.
“La cantante Sally Bowles inicia un triángulo amoroso con un improvisado profesor de inglés exiliado de Cambridge y un aristócrata local que subestima el poder de convocatoria de los nazis. Los tres están a punto de entrar al infierno, aunque el recorrido hasta él pueda, por momentos, ser alegre, musical, hasta festivo”, supo escribir Federo Romani.



Con la producción general de Paulina Kucic Estudio de Danza y la dirección de Cristian Wilhjelm, más de 30 actores en escena en el Teatro Español de Reconquista para crear la atmósfera asfixiante de ascenso del nazismo, donde un maquiavélico maestro de ceremonia encarnado por Sebastián Mansur, se convierte una pieza clave para que Paulina Kucic (Sally Bowles) César Clementin (Clifford Bradshaw), Alejandrina de Prato (Fraulein Schneider), Fernando Bais (Herr Schultz) y Alfonso Torres (Ernst Ludwig) desanden la historia.
“Esta es la última función del año y no sabemos qué pasará el año próximo”, se despidió el director, casi como en una continuación del libreto que le tocó adaptar.



CABARET
Emcee: Sebastián Mansur
Sally Bowles: Paulina Kucic
Clifford Bradshaw: César Clementín
Fraulein Schneider: Alejandrina De Prato
Herr Schultz: Fernando Bais
Ernst Ludwig: Alfonso Torres
Cabaret Girls: Fraulein Fritzie Kost (Agustina Lescano); Rosie (Amparo Pereson); Lulu (Juliana Pividori); Frenchie (Morena Basimiani); Texas (Victoria Lorenzini Braidot); Helga (Uma Willam).
Cabaret Boys: Bobby (Jeremías Quinteros); Víctor (Valentino Montero); Hans (Ignacio Muchiut); Heman (Kimey Rivas).
Trabajadores del Cabaret / Soldados: Ayelén Buyatti; Ian Fernández Mazza; Isaac Pepermans; Samuel Olmedilla Franco; Sara Sosa Luque; Sofía Espíndola Stella.
Clientes del Cabaret: Facundo Cardozo; Ian Fernández Mazza; Isaac Pepermans; Lautaro Lopez; Mateo Coronel; Nadia Retamozo; Paula Eichemberger; Rubén Delgado; Samuel Olmedilla.
Escenografía: Fernando Bais; Paula Solari
Producción musical: Sebastián Mansur; Alejandrina De Prato; Cristian Wilhjelm
Adaptación de guión: Cristian Wilhjelm
Técnica en sonido: Lucia Voegeli
Técnica de iluminación: Jeremías Hernández
Diseño de iluminación: Fernando Bais
Vestuaristas: Alejandrina De Prato; Paulina kucic
Vestuario y utilería creativa: María Luz Delgado
Gráfica, videos y redes: Cristian Wilhjelm
Producción general: Paulina Kucic; Alejandrina De Prato; Fernando Bais; Cristian Wilhjelm
Asistencia de Producción: Sonia Stizza
Dirección CoreogrÁfica y de Bailarines: Paulina Kucic
Dirección Interpretativa y Dirección General: Cristian Wilhjelm